La Voz de Galicia. El fiscal de Medio Ambiente Álvaro García Ortiz ha presentado una denuncia contra Endesa y Endesa Generación en los juzgados de Ferrol por presunto delito contra el medio ambiente y los recursos naturales por los daños causados por la presa de A Capela en el río Eume.
En el escrito de denuncia, el fiscal alude a un escrito elaborado por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y a una denuncia interpuesta por «Ríos con vida», así como a distintos informes de la Xunta y la propia compañía, según informó la Fiscalía de Medio Ambiente.
Según recoge el escrito, el Seprona se puso en contacto con responsables de Endesa Generación en enero del 2010, que señalaron que en la concesión que tienen para explotar ese embalse no viene establecido que tengan que atenerse a ningún tipo de caudal ecológico, por lo que se cumple la Ley de Pesca Fluvial de 1942.
Requeridos los responsables de Endesa Generación para que indicasen el caudal ecológico que debe respetar la concesión, la forma de medición y el organismo de control, así como el sistema de evacuación, éstos reiteran que la concesión no establece caudal ecológico y que «de forma voluntaria» hace sueltas en dos puntos del río para que mantenga el caudal mínimo.
También señalan los responsables de esta firma que no les constan «ni por su parte ni por ninguna Administración» de daños ambientales en el río Eume.
Preguntada Aguas de Galicia, dependiente de la Xunta, por estos mismos puntos, este organismo «contradice abiertamente» la versión de Endesa, según el escrito el fiscal, ya que «no reconoce la existencia de aportes permanentes, sino de una fuga en la válvula del propio desaguadero del fondo».
También la Consellería de Medio Rural señala que «no tiene constancia» de que desde 1960 se haya soltado caudal ecológico en el tramo afectado, 3,4 kilómetros del río Eume, que ha permanecido «seco, salvo pequeños aportes de algún regato existente, a excepción de los momentos en que el embalse ha rebosado por el aliviadero de lámina libre que posee el muro. Ello ha provocado la pérdida del ecosistema acuático».
«De lo actuado se desprende pues que desde hace cincuenta años un tramo del río Eume no recibe un aporte constante de agua para garantizar la vida y el ecosistema en su seno y ello es consecuencia de la existencia de una presa y de que desde la construcción de la misma no se garantiza tal aporte», apunta el fiscal, quien destaca también que la pérdida del ecosistema acuático es un hecho «casi notorio».
García Ortiz sostiene en su denuncia que la Ley de Pesca Fluvial de 1992 indica que «las concesiones de aprovechamientos hidráulicos deberán en todo momento respetar el caudal ecológico necesario para facilitar el normal desarrollo de las poblaciones piscícolas» y también establece el caudal ecológico.
«Nos encontramos ante un indicio de comisión de hecho delictivo (…) podemos hacer coincidir, por un lado al establecimiento de la obligación legal, 1992, Ley de Pesca Fluvial y, por el otro, al momento en que se transmite la titularidad de la explotación Endesa Generación, en 2001», concluye el fisca