El pontés Artemio Formoso Barro, campeón del mundo en “handisport”

[Diario de Ferrol] Apenas un años después de perder un brazo en un accidente de coche, el pontés Artemio Formoso, Temi, se proclamó campeón del mundo en la categoría “handisport”, que reúne a personas con discapacidades físicas. El entorchado le llegó en la cita que se disputó entre el 26 y el 29 de agosto en el campo de tiro Cortijo Carrero, en la localidad cordobesa de Benamejí. Las altas temperaturas –se llegó a los 47 grados– marcaron el devenir de este Campeonato del Mundo de Compak Sporting, que congregó a 300 tiradores entre todas sus categorías.

Artemio Formoso, que ya se había alzado con el título en el Nacional disputado en julio, resultaba un auténtico desconocido para el resto de participantes, que quedaron asombrados con su primera ronda, en la que sólo falló uno de los 25 platos lanzados. Aunque en la siguiente no pudo mantener ese nivel, sí lo hizo lo suficientemente bien como para proclamarse campeón con una ventaja de tres dianas.
El tirador pontés tomó parte también en la competición general en la que, a pesar de medirse a rivales sin limitaciones funcionales, logró acabar entre los cien primeros de un total de trescientos deportistas.
Superación > El de Artemio Formoso es un ejemplo de superación. Aficionado a la caza desde hace tiempo, hace un año perdió un brazo en un accidente, lo que no lo privó de seguir practicando su deporte favorito. Cuando se acaban de cumplir doce meses de su percance, sus resultados deportivos corroboran su buen estado de forma físico, pero también mental, como el mismo apunta. “Fui a Córdoba de milagro, porque no tenía patrocinador y nadie me ayudaba”, explica, “pero quería hacerlo por mi mismo, porque sabía que tenía posibilidades, y lo necesitaba para mi cabeza”. Tan sólo la colaboración de un amigo empresario –Seguros Matojoma– le permitió emprender este desafío del que ha salido victorioso y que espera que le abra las puertas para futuros mecenazgos que le permitan seguir compitiendo a este nivel.
Ahora, cuenta con que experiencia sirva de ejemplo a otras personas que estén pasando por el mismo trance –“La cabeza te engaña y a veces te pones más limitaciones de las que tienes”–, a las que ofrece su ayuda.