Garantía del móvil: todo lo que el fabricante no cubre

Cuando adquieres un nuevo smartphone, tableta o portátil, así como cualquier otro gadget o dispositivo electrónico, la garantía cubre ciertos aspectos, pero deja fuera ciertas situaciones cotidianas que parecen ser más habituales de lo normal.
Conviene tener en cuenta qué tipo de cláusulas están contempladas y cuales no a la hora de realizar la compra, con el fin de optar por la garantía ampliada que las principales marcas nos ofrecen de manera adicional, en ocasiones por precios bastante asequibles y con posibilidad de reemplazar el dispositivo de inmediato. Otra opción es considerar la compra de algún dispositivo más robusto o acorde a nuestra actividad personal o profesional. Algunos garantizan cierta resistencia a inmersiones o salpicaduras, o bien, robustez en sus acabados para soportar caídas o golpes más consistentes.


Pantalla rota
Los efectos de la gravedad suelen hacer estragos con los dispositivos que disponen de pantalla de cristal LCD, y a pesar de la aplicación de ciertas tecnologías de protección, como la desarrollada por Gorilla Glass sobre los paneles táctiles, es inevitable que los dispositivos sufran daños. Este tipo de roturas o daños tan solo es cubierto por los fabricantes con una modalidad de garantía extendida que supone un coste extra al habitual del producto. No obstante, si utilizamos el dispositivo de manera constante y resulta fundamental para desarrollar nuestro trabajo, puede que nos convenga optar por su contratación. Por citar un ejemplo, el modelo AppleCare Protection Plan de Apple para sus iPhone supone un coste extra de 70 euros anuales con servicio express de reemplazo.
Fallo del Sistema Operativo
No suele ser habitual, puesto que los dispositivos de hoy en día ofrecen una gran fiabilidad, en este sentido, con posibilidad de aplicar correcciones con solo actualizar la versión del sistema operativo o su firmware. No obstante, existen ocasiones en que la pantalla se queda congelada o no responde ni tan siquiera a la combinación de teclas conocida como “hard reset”. Problemas como estos están relacionados directamente con el hardware, situaciones en las que el fabricante cubre la reparación o la sustitución del dispositivo en última instancia.
Dispositivo mojado
De siempre se ha dicho que el agua y los dispositivos electrónicos son una mala mezcla. Parece que con los últimos desarrollos este tópico poco a poco quedará en entredicho, pero salvo algunos fabricantes como Sony con sus smarphone y tabletas Xperia Z, la tónica sigue siendo una mala combinación. De este modo, la garantía de los dispositivos electrónicos no queda cubierta si éstos entran en contacto con algún tipo de líquido. De hecho, muchos llevan en su interior un sensor que garantiza al fabricante si el fallo del smartphone se ha producido contacto con líquidos. Así pues, ya no sirve reclamar al fabricante que el dispositivo no ha sido mojado, ya que el detector lo confirmará.
Robo o hurto
Los portátiles han sido durante años los principales objetos de deseo para los ladrones, ya sean sustraídos de los vehículos, cafeterías o cualquier otro lugar. A esto hay que añadir el gran número de dispositivos que son perdidos en aeropuertos. Según varios estudios realizados se confirma que un portátil o tableta es robada cada 53 segundos. La garantía del fabricante, como parece lógico, no se hace cargo de este tipo de pérdida. Siempre es posible adquirir algún tipo de seguro que cubra este inconveniente, pero suele resulta caro, por regla general.
Accidentes y desastres naturales
Ninguna compañía ofrece cobertura de este tipo derivada por algún acontecimiento de incendio, terremoto o huracán. Los fabricantes se mantienen unidos en este sentido indicando que son causas muy puntuales que suele suceder. No obstante, es algo que puede suceder, como hemos visto desgraciadamente en los últimos años, y ninguna marca del planeta cubre los datos o destrozos del dispositivo causados por este tipo de catástrofes naturales.
Garantías extendidas
En cualquier caso, debemos leer la letra pequeña de las garantías extendidas ofrecidas por los fabricantes, si lo que queremos es tener una cobertura completa durante al menos el primer año de uso del dispositivo. Las pólizas suelen cubrir todo lo que la garantía estándar no contempla.
La infografía de Worth Ave Group revela una serie de datos transcendentales, fruto de un estudio realizado recientemente. En ella podemos observar cómo un 42 por ciento de los usuarios en algún momento de su vida ha sufrido una rotura de la pantalla de su dispositivo. Por su parte, un 38 por ciento ha tenido un mal funcionamiento relacionado con la botonera o el sistema. Finalmente, el 25 por ciento ha sufrido algún derrame de líquido en el dispositivo que ha provocado el mal funcionamiento del mismo.
Fuente IDG

También podría gustarte
Comentarios