Un apagón de pega

[El Pais] A las 9.18 de ayer, un fallo en la subestación del pueblo gallego de As Pontes de García Rodríguez se extendió a toda la red eléctrica peninsular. En unos minutos, España y Portugal se quedaron sin luz. Un equipo de urgencia formado por 51 personas y 13 empresas del sector trabajaron durante toda la mañana para restablecer el servicio en el noroeste de la Península.

Ésta es la premisa de la que ayer partió Red Eléctrica de España (REE) para realizar un simulacro de recuperación del sistema. El objetivo era comprobar la coordinación entre los centros de control. Aunque la empresa encargada del transporte de la energía en España realiza este tipo de experimentos casi todos los años, ésta es la primera vez que lo hace conjuntamente con Rede Eléctrica Nacional, su homóloga portuguesa.
La alarma despertó el protocolo de actuación habitual: el comité de emergencia se pone en contacto con Protección Civil, quien da instrucciones a las comunidades autónomas. El Consejo de Seguridad Nuclear también recibe información sobre el accidente.
A pesar de que se supone que España y Portugal han quedado totalmente apagadas, el simulacro se limita a restablecer el servicio en tres de las siete zonas en las que se divide el mapa eléctrico español: Duero-Francia, Galicia-León y Asturias-Cantabria. Y también en el norte de Portugal.
Los responsables de REE convocaron a los periodistas para mostrarles, visiblemente satisfechos, los buenos resultados del experimento. Después del mediodía, el suministro se ha restablecido en casi todas las zonas del noroeste. Y a las dos de la tarde no queda ni rastro de la avería.
Pero una duda gravita en el aire: ¿cómo puede ser que en sólo unas horas devuelvan el servicio a más de 50 millones de personas, mientras que el pasado mes de julio más de 100.000 barceloneses se pasaron varios días sin poder encender la luz?
La empresa responde que en Barcelona tuvieron que restablecer una red de distribución que había dejado de existir por una avería en una subestación. Y que el simulacro de ayer se limitaba a un problema de transporte de electricidad. Lo que no dicen es que siempre es más fácil solucionar averías de juguete que problemas reales.