[El Progreso, por C.A.] Los colectivos ecologistas Adega, Sociedade Galega de Historia Natural, Verdegaia, Colectivo Ártabra 21, Federación Ecoloxista Galega, Fusquenlla, Guerrilleiros das Fragas, Lapis Verdes, O Rabo do Galo y el Club de Montaña Ferrol muestran “absoluta oposición” al proyecto de apertura de la mina de andalucita en As Pontes y critican a la Xunta por conceder a la empresa promotora, Picobello Andalucita, la declaración de impacto ambiental tras nueve años.
Desde los colectivos, que no es la primera vez que se movilizan en contra de este proyecto, aseguran que la explotación de andalucita supondrá la destrucción del nacimiento del río Belelle y que afectará “gravemente” a las Fragas do Eume, algo que niegan desde la empresa, ya que aseguran que adaptaron el proyecto para cumplir con el área de protección de este espacio.
Los ecologistan alertan de que el proyecto “afectaría muy negativamente a la cantidad y a la calidad de las aguas bombeadas del río Belelle en la estación de captación hecha por el Ayuntamiento de A Capela para abastecer de agua potable a todo el municipio y a la parte alta de Fene y Cabanas, así como Neda y Ferrol”. Además, aseguran que el lugar previsto para la escombrera está sobre el Manciñeira, afluente del Eume, que también se podría ver afectado.
Impacto ambiental
La declaración de impacto ambiental fue publicada el 11 de marzo en el Diario Oficial de Galicia (DOG) por parte de la Secretaría Xeral de Calidade e Avaliación Ambiental. El proyecto de la mina depende ahora de la aprobación de Industria, el último requisito para ponerla en marcha.
Los ecologistas consideran que la declaración ambiental “está llena de errores e incongruencias”, y subrayan que “sorprende que después de ser rechazado por la anterior Consellería de Medio Ambiente, ahora se le pretenda dar luz verde al proyecto sin que sufriera modificaciones significativas”.