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As Pontes

Nuevo fracaso en las negociaciones entre empleados y dirección de Einsa

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[La Opinión de A Coruña] Ninguna de las partes movió ficha en la primera reunión con el mediador que se celebró ayer entre los trabajadores de la empresa de artes gráficas Einsa y la dirección de la compañía, que se encuentran sumidos en un conflicto a raíz de los 26 despidos efectuados a principios de año y que podrían llegar a 40 si no se logra un acuerdo.


Tras este infructuoso encuentro, el mediador emplazará a cada una de las partes a mantener una reunión con cada una de ellas para conocer sus exigencias y, en el caso de existir, las concesiones que están dispuestos a hacer. Así lo explica el presidente del comité, Constantino Piñeiro, que lamenta que en los últimos seis meses no haya habido “avance alguno”. Mientras que la empresa alega una complicada situación económica derivada de una deuda de 42 millones de euros, la plantilla, formada por más de 400 personas, está dispuesta a aceptar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para aliviar la situación pero no en las condiciones “inasumibles” que plantea la entidad, que tiene instalaciones en As Pontes y en la villa de los Andrade. Trabajar los sábados de forma gratuita y que el ERE únicamente afecta a parte de los empleados son los principales obstáculos que observan los trabajadores para alcanzar un acuerdo.
Otra de las cuestiones que se abordó en la reunión de ayer, que se extendió durante más de tres horas, fue la refinanciación de parte de la deuda gracias a la decisión de la Xunta de aplazar el pago de 8 millones de euros durante dos años. Parte de los trabajadores tenían dudas, ahora disipadas, sobre si se trataba de una subvención o una refinanciación. “Por el momento desconocemos si el aplazamiento del crédito tendrá alguna influencia sobre nuestro futuro”, explica el representante de los trabajadores que espera “sacar algo en claro” a partir de la semana que viene.
De lo que no dudan es de que mantendrán su postura para evitar el despido de más personas o su peor temor: el cierre de las instalaciones, lo que dejaría sin trabajo a 400 personas en la comarca del Eume. “Ni ellos pusieron sobre la mesa el tema de los ceses ni nosotros el de las movilizaciones, pero ambas partes sabemos que están ahí”, destaca Constantino Piñeiro.

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