Su intención era hacerle llegar un comunicado al principal accionista de la empresa, la italiana Enel, que según los trabajadores, se niega a mantener los beneficios sociales de los empleados pasivos, principalmente pensionistas.
Aseguran que la empresa rompió por completo las negociaciones con los trabajadores para no tener que abonar los más de 700 millones de euros que suponen los beneficios sociales de estos empleados en toda España. Informan de que el viceconsulado no ha querido atenderlos. Volverán a manifestarse en A Coruña el día 13 de marzo.
Fuente SER