Desembarca la PSP en Europa y Estados Unidos
Sony lanzará probablemente su nueva consola PlayStation portatil (PSP) en Estados Unidos y Europa en marzo, según ha declarado un ejecutivo de alto rango de la empresa. Anteriormente, Sony sólo había dicho que empezaría vendiendo la PSP, que también permite ver películas y escuchar música, en Europa y EEUU entre enero y marzo.
La compañía lanzó al mercado la consola en Japón el pasado 12 de diciembre a un precio de 190 dólares. Para el 31 de diciembre, ya había despachado alrededor de 510.000 unidades, y espera alcanzar los tres millones en todo el mundo para el 31 de marzo.
“Probablemente será marzo”, aseguró el presidente y presidente ejecutivo de Sony Computer Entertainment, Ken Kutaragi, en una reunión de ejecutivos empresariales, en respuesta a la pregunta de cuando comenzaran a vender la PSP en el mercado estadounidense.
Un portavoz de SCE, la rama de videojuegos de la empresa, aseguró que habría una presentacisn de la consola ante los periodistas en Las Vegas en horas de la tarde del miércoles en un emplazamiento cercano a la feria de Electrónica para el Consumidor, que se lleva a cabo en esa ciudad estadounidense.
“Nos gustaría lanzarla en Europa también en marzo”, añadió Kutaragi, en referencia a la celebración religiosa que tendra lugar este año a finales de ese mes.
Sony espera representar un serio desafío en el mercado de las consolas portátiles a Nintendo, que fue una de las empresas pioneras del formato con sus productos Game Boy.
Nintendo lanzó su modelo portátil mas reciente, la Nintendo DS, el 21 de noviembre en Estados Unidos y el 2 de diciembre en Japón.
Ademas, espera lanzar la DS en Europa en marzo y tiene previsto despachar cinco millones de unidades de este aparato que es del tamaqo de un cuaderno de bolsillo, tiene dos pantallas y una conexisn inalambrica en todo el mundo el 31 de marzo.
Kutaragi afirmó que las ventas de PSP están siendo muy fuertes, pero que será un reto para Sony batir su propia marca de tres millones de unidades despachadas, debido a las dificultades para proveerse de suficientes componentes claves, como los semiconductores avanzados.