El patrimonio perdido

[La Opinión A Coruña] As Pontes está estigmatizada por una mina de carbón y una chimenea de más de 350 metros de altura. En la localidad minera por excelencia de Galicia la central térmica contamina y da de comer. Si se le pregunta a alguien por este municipio de la comarca eumesa, sin duda destacará su faceta industrial y, en raras ocasiones, la de enorme yacimiento arqueológico.

La Asociación de Estudos Históricos e Sociais Hume trabaja por la recuperación del pasado de una villa que se centró en su aspecto económico e industrial y olvidó su historia y por el estudio y conservación de su patrimonio. Su presidente, Xabier Martínez, asegura que aquí se conserva uno de los cementerios europeos más importantes del hombre primitivo y hace hincapié en los casi 200 túmulos funerarios que hay en el camino Arrieiro y en el círculo lítico de A Mourela.
El colectivo Hume trata de evitar que se repitan sucesos como el denunciado hace unos días por el presidente del Instituto de Estudos Chairegos, José Luis Novo Cazón, en el transcurso de las jornadas que cada año organiza la asociación pontesa. ¿Puede una vasija de 4.000 años de antigüedad desaparecer de la vitrina en la que estaba expuesta sin que nadie sepa nada al respecto? Puede.
Al parecer, los miembros de Hume sabían que la vasija campaniforme encontrada a comienzos del siglo pasado en As Pontes faltaba de su vitrina, situada en el departamento de Prehistoria de la Universidad de Santiago, desde hacía unos cuatro años. Ahora el dato ha sido confirmado por la institución académica. Desde el vicerrectorado de Cultura y desde Patrimonio explican que el vaso, que tiene forma de campana invertida y está decorado con varias bandas transversales y simétricas, podría no haber sido catalogado. En el Concello, que emplea como regalo institucional una reproducción de este objeto, no saben nada al respecto. En los foros creados sobre este tema en internet la frase: “¿Cuánto más vamos… vamos a perder aún de nuestro patrimonio?”.
En el estudio La cerámica campaniforme gallega (1982), de Felipe Criado y J.M. Vázquez, sus autores señalan que los trabajos en este ámbito comienzan con los hallazgos realizados por el investigador ferrolano Santiago de la Iglesia a comienzos del siglo XX en la comarca de As Pontes. El historiador Federico Maciñeira también encontró en la misma zona nuevos ejemplares de este tipo de cerámica, sin embargo, no publicó nada al respecto hasta el año 1941.
Luis Pericot es el autor del estudio Los vasos campaniformes de la colección de la Iglesia, publicado en 1927 en el Boletín de la Real Academia Gallega. En él ahonda sobre la restauración de los vasos campaniformes encontrados en Vilabella. En este lugar se encontraron dos, uno prácticamente entero y los restos de una cara de un segundo. El primero de ellos es el que se conservaba en Santiago y fue restaurado por la Diputación de Barcelona.
El médico ferrolano Santiago de la Iglesia también encontró en una de sus exploraciones en la llanura de As Pontes una diadema de oro, un puñal de cobre y cuatro puntas de proyectil del mismo metal. A este conjunto de objetos se le conoce como el Tesoro de As Pontes. El profesor de Prehistoria de la Universidad de Santiago J.M. Vázquez Varela señalaba en un artículo publicado en el año 1992 en el libro Festa do Carmen que dicho tesoro se conservaba entonces en una vitrina en el Decanato de la Facultad de Xeografía e Historia de Santiago. Vázquez Varela hacía una reflexión y manifestaba que el auténtico valor de estos objetos es el conocimiento que se puede obtener de la historia a partir de ellos. “Por ello creemos que no sería mala idea que el año que viene [por 1993], en el que se cumple el centenario de su descubrimiento, después de casi 4.000 años de ocultación en la tumba, se celebrase una exposición en la villa bajo el lema El tesoro de As Pontes vuelve a casa y así los ponteses pudiesen disfrutar siquiera sea de un modo temporal de estas reliquias de su pasado”.
Según destacan desde Hume, a este tesoro se le perdió la pista en un laboratorio en Vigo. La asociación denuncia la gravedad de los hechos y hace hincapié en la cantidad de objetos del Megalítico que se encuentran en manos particulares y en colecciones privadas, así como en la necesidad de un museo en As Pontes.