As Pontes, primer municipio gallego en eliminar el impuesto de plusvalía
El fallo del Constitucional estima que la aplicación de dicha tasa no es legal en los casos en los que no se produce ganancia económica alguna
La sentencia dictada por el pleno del Constitucional que dispone que el impuesto de plusvalía municipal tendrá que ser reformado ha provocado las primeras reacciones en municipios como el de As Pontes, donde ya han movido ficha. El fallo del alto tribunal estima que la aplicación de dicha tasa no es legal en los casos en los que no se produce ganancia económica alguna.
La plusvalía -denominada técnicamente como impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana- se calcula atendiendo a dos criterios: el valor catastral del bien y los años durante los que el propietario ha sido titular del mismo. Ahora, el alto tribunal apela a la inconstitucionalidad de los impuestos que afecten a «aquellos supuestos en los que la capacidad económica gravada por el tributo sea no ya potencial, sino inexistente, virtual o ficticia».
En el caso pontés, se recaudan por este concepto unos 150.000 euros al año, «aunque hubo excepciones en momentos como cuando se pusieron a la venta los poblados de Endesa a los trabajadores y tuvieron que liquidarlo», recuerda Alonso. Ahora, a pesar de que «la sentencia no nos afecta en el 95 % de los casos, hemos tomado la decisión de eliminarlo con carácter general» porque «ya hay otros impuestos que gravan el patrimonio y la transmisión de la propiedad, aunque no sean de carácter municipal». El procedimiento para extinguir la ordenanza que refleja la tasa ya está en marcha y, si se cumplen las previsiones, «será cuestión de semanas» que la medida se haga efectiva.