Uno de los principales mercados con el que se cuenta es el del traslado de carbón de Endesa a As Pontes, que en la actualidad se hace por carretera
[La Voz de Galicia, por A. Vellón] El estudio informativo del enlace ferroviario al puerto exterior de Ferrol recoge diferentes aspectos técnicos, de trazado y presupuestarios. Por ejemplo, su coste -como adelantó ayer La Voz- asciende a más de 107 millones de euros y la duración de las obras se ha estimado en cuatro años. Se ha seleccionado, de tres rutas posibles, la denominada traza sur. De 6,7 kilómetros, saldrá del Fernández Ladreda y llegará a Caneliñas a través de un viaducto sobre la ensenada de A Malata y de un gran túnel bajo los montes de Brión.
Pero en el documento se establece también un estudio de oferta-demanda en el que se concluye que en su puesta en marcha podría transportar ya 4,7 millones de graneles y mercancías al año y alcanzar prácticamente los seis millones en el 2020. Se utilizarían convoyes tanto de Renfe como de Feve. Esa duplicidad ya se prevé en el texto. Se apunta que la conexión con la línea ferroviaria ya existente «se realizará por medio de una línea de mercancías para una velocidad de diseño de 70 kilómetros por hora y ancho Renfe. No obstante, en el diseño se prevé, como primera consecuencia del estudio de demanda realizado, la instalación de un tercer hilo para ancho métrico (Feve)».
El mapa de tráficos
¿Cuáles serían los tráficos potenciales para conseguir las mencionadas cifras? Algunos que ya existen y otros de nueva captación. Cabe destacar que en esa proyección de cargas no se han incluido, por el momento, los contenedores, a pesar de ser el gran objetivo de la Autoridad Portuaria Ferrol-San Cibrao.
Uno de los principales mercados con el que se cuenta es el del traslado de carbón de Endesa a As Pontes, que en la actualidad se hace por carretera. En el documento se establece que, sin eliminar completamente los camiones, «dos millones de toneladas se transportarían por ferrocarril, lo que daría lugar a 3.077 trenes/sentido/año». También hace referencia el texto a la posibilidad de que la compañía concentre en Ferrol los tráficos a la térmica de Compostilla, próxima a Ponferrada, que hoy canaliza desde las radas de A Coruña y Gijón.
Pero del tren, además, se podrá beneficiar el movimiento de chatarra y productos siderúrgicos. En el texto se indica que «son tráficos generados por la siderúrgica Megasa» en Narón. Se considera que son mercancías «potencialmente captables por el modo ferroviario siempre que el transporte por ferrocarril se realice directamente desde el puerto hasta la fábrica», ya que se trata de productos de elevado peso y bajo valor añadido. Podría llegar a generar entre 1.000 y 1.400 trenes por sentido y año.
A estas mercancías susceptibles de ser transportadas por tren se suman en el estudio informativo otras como el cemento, el clínquer o, incluso, la dunita de Cariño.
Como ya se ha mencionado, en el documento se estima que en el 2020 se podrían estar moviendo a través del ferrocarril casi seis millones de toneladas. De ellas, cuatro utilizarían la red de Feve mientras que el resto usarían la de Renfe. Frente a este horizonte está la situación actual, en la que el convoy apenas se usa para el traslado de graneles y mercancías manipulados en las radas.