El conselleiro de Economía e Industria de la Xunta, Francisco Conde, aplaudió ayer la capacidad de Endesa de generar “empleo y riqueza” en la comarca minera a través de la explotación de la mayor central térmica de España, con cuatro grupos eléctricos y una planta de ciclo combinado que suman “2.400 megavatios de potencia instalada”.
Fue durante una visita oficial del titular de Industria del gobierno gallego el mediodía de ayer a la planta térmica, que invirtió millones en transformar las calderas para adaptarlas a la quema de carbón importado que comercializa a través del puerto exterior de Ferrol, con mayor poder calorífico y menos contaminante que el lignito pardo local.
Conde destacó que la térmica, que definió como un complejo eléctrico “clave”, funciona “como eje vertebrador de riqueza” para las comarcas de Ferrol, Eume y Ortegal, y que conecta con la planta de gas de Mugardos.
Para acompañar la afirmación, el conselleiro subrayó que Endesa genera casi dos millares de empleos en la zona -1.900 dijo- que resultan de sumar los directos y los indirectos (transporte, logística portuaria, reparaciones..) e incidió en que “es un ejemplo de la apuesta por la eficiencia y la sostenibilidad en la industria gallega”.
El yacimiento pontés se cerró en diciembre del 2007 y desde entonces, Endesa quema hulla que compra en Estados Unidos y sobre todo, en Indonesia.
El inmenso hueco de la mina se transformó en uno de los mayores lagos artificiales de Europa, con 865 hectáreas y cotas de profundidad de 206 metros que embalsan 547 hectómetros cúbicos de agua dulce. “Un ejemplo de minería sostenible” a partir de una mina a cielo abierto que es “un referente nacional y europeo”, apostilló Conde.
La escombrera de cenizas también se regeneró con la plantación de miles de árboles y la colonización espontánea de especies animales. Casi 180 fueron contabilizadas por un equipo de zoológos de la Universidad de Santiago que los documentaron en la publicación ‘Los habitantes de la escombrera’