Asegura que la decisión de archivar las diligencias de investigación deja abierta su reapertura si se evidencia nuevos datos delictivos
[EuropaPress] La Fiscalía de Medio Ambiente archivó la investigación penal abierta tras las denuncias de varias asociaciones ecologistas y vecinales por el llenado del lago artificial de la antigua mina de Endesa en As Pontes (A Coruña) y la acidez y mortandad de peces provocada en la aguas del Río Eume por las obras de la autovía Ferrol-Vilalba.
Según informó la Fiscalía Superior de Galicia, tanto el llenado del hueco de la mina con agua procedente del Eume, como la construcción de la autovía comportan, sin duda, una intervención que alterará de una manera significativa el entorno natural y lo intervenido de la zona, de modo consciente, programado y, a la vista de los estudios aportados, dentro siempre de los más estrictos márgenes de legalidad.
Esto excluye, según recalcó, su consideración como delito ecológico. No obstante, manifestó que la decisión de archivar las diligencias de investigación deja abierta su reapertura si se evidencia nuevos datos presentamente delictivos.
El Ministerio Público especificó que, en el caso concreto de las obras viarias que afectan a las aguas fluviales, si algún reproche se le puede hacer a la Administración autonómica es el de no haber previsto en la declaración de impacto ambiental la posibilidad de que el efecto de acidificación del río a causa de las escorrentías pudiera producirse. En la actualidad sólo queda adoptar medidas de naturaleza correctora como las que se están llevando a cabo, señala el decreto de archivo.
El documento de la Fiscalía explica que, en una primera fase de su investigación, además de pedirle a la Xunta diversos informes sobre el proyecto para la mina, le encargó al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil una inspección ocular documentada que constatara las aportaciones de agua, su acidez y la posible repercusión en el llenado final y sobre los parajes protegidos.
CATASTROFE ECOLOGICA
El informe del Seprona, que incluyó el problema generado por la autovía, concluye que en el río que alimenta un paraje protegido como son las Fragas do Eume puede llegar a darse una auténtica catástrofe ecológica, y el llenado del hueco de la mina de As Pontes pudiera no solucionar, sino agravar, los problemas medioambientales que trata de resolver, al crear un lago artificial de considerables dimensiones en el que las aportaciones sean nocivas o no adecuadas.
En esta línea, la Fiscalía explicó que, a la vista de este panorama nada alentador, pero tampoco, en principio, constitutivo de delito alguno, se decidió prorrogar las diligencias informativas solicitándoles a las universidades de A Coruña y Santiago estudios analíticos y edafológicos para evaluar la magnitud del problema.
También fueron requeridos a Endesa informes y análisis periódicos sobre las aportaciones de agua a la mina y sobre las medidas correctoras previstas o aplicadas.
En su resolución final, la Fiscalía de Medio Ambiente tomó conocimiento de los proyectos y planes de vigilancia y seguimiento ambiental del llenado de la mina, todos aprobados por el organismo autonómico Augas de Galicia.
En cuanto a la acidificación del río, el Departamento de Edafología y Química Agrícola de la Universidade de Santiago explicó a la Fiscalía que, en condiciones normales, el efecto tóxico de acidez y la concentración de metales solubles son amortecidos por el elevado volumen del agua del embalse del Eume. Esto no ocurre en temporadas anormalmente secas, como desde noviembre de 2007 a marzo de 2008, en las que se registró una fuerte mortandad de peces, precisó.
Con todo, el Ministerio Público destacó que entiende la controversia social suscitada por este tipo de intervenciones sobre el medio rural y la actitud vigilante y de denuncia de las asociaciones ecologistas. Pero recordó también que la Fiscalía, especializada y con una clara sensibilidad medioambiental, debe regirse por los parámetros de legalidad y prueba, lejos de valoraciones personales y subjetivas.