La rentabilidad de las instalaciones españolas
[La Voz de Galicia] Si bien en los orígenes del proyecto fue el empresario Roberto Tojeiro el alma máter de la planta de gas gallega, una vez construida la infraestructura fue la primera eléctrica del país la que asumió el control ejecutivo de la empresa. En el largo y tortuoso camino de la tramitación administrativa, Endesa no dejó de repetir que Reganosa era un activo estratégico, y ahora, tres años después de entrar en funcionamiento, acaba de dejar de serlo.
¿En qué contexto se produce el cambio de la eléctrica con respecto a Reganosa?
La compra de Endesa por parte de la italiana Enel, a principios del pasado año, ha marcado un punto de inflexión en la trayectoria de la compañía, que en los últimos años ha realizado un significativo esfuerzo inversor en Galicia, en donde ha transformado su central térmica de As Pontes para quemar únicamente carbón de importación; ha construido una nueva terminal de descarga de mineral del puerto exterior ferrolano y una central de ciclo combinado de 800 megavatios de potencia. Si bien los resultados del primer trimestre del año presentados hace unos días por Endesa han sido positivos, no así los de su dueño: Enel ha ganado un 45% menos que en el mismo período del año anterior. En un contexto de crisis económica y con inversiones a largo plazo que no están encontrando la rentabilidad necesaria, como es el caso de las centrales de ciclo combinado, Enel ya ha iniciado contactos con el fin de vender hasta el 80% de Endesa Gas por unos 800 millones de euros, como anunció en Roma el director financiero de la compañía.
¿Por qué han dejado de ser estratégicas las participaciones en las plantas de gas?
Endesa lo explica porque ya tiene garantizado el acceso a la planta en condiciones similares a las de los socios. Sin embargo, el hecho de que la eléctrica abra la puerta a deshacerse de este tipo de activos se enmarca en que son unas infraestructuras que tienen asegurada su rentabilidad por ley y por ello apetecibles para los inversores. Las regasificadoras reciben unas retribuciones estatales por distintos conceptos, entre ellos la antigüedad de las instalaciones y sus activos, y los costes de operación y mantenimiento, que garantizan que sean rentables con independencia del grado de uso.
¿Qué empresas podrían estar interesadas en entrar en Reganosa si Endesa enajenase su participación?
Enagás, el gestor técnico del sistema, ha manifestado en reiteradas ocasiones su interés por adquirir activos en todas las plantas de gas del país «siempre y cuando sea compatible con los objetivos de rentabilidad» que persigue. Fruto de esa política, el pasado año cerró la compra del 25% de la regasificadora vasca. El desembarco de la japonesa Osaka en Sagunto demuestra que la red española también despierta interés a nivel internacional.
¿Cómo puede afectar una posible venta de activos a la planta gallega?
Reganosa impulsa un proyecto de ampliación de su capacidad de regasificación que se encuentra en estos momentos ralentizado debido a las condiciones del mercado. Sin embargo, se trata de una actuación recogida en la planificación estratégica nacional hasta el 2016, por lo que los nuevos socios que pudiesen incorporarse asumirían la obligación de continuar impulsando este proyecto.
¿Podrían producirse otros cambios de accionariado en la terminal?
Además de Endesa y Gas Natural, que tienen el 21% del accionariado, el Grupo Tojeiro tiene el 18%; la Xunta, Caixa Galicia y Sonatrach, el 10%; y Banco Pastor y Caixanova, el 5%. La fusión de las cajas podría traer consigo otros cambios, si estas se ven obligadas a desinvertir en sus carteras industriales.