[Xornal de Galicia – Francisco J. Gayoso – Secretario da Federación de Industria de CC.OO.]
En primer lugar hay que hacer mención de cómo surgió el problema de stock de almacenamiento del carbón nacional. Debido a la fuerte crisis que sufrimos se redujo la demanda de energía eléctrica y las C.T. que consumen carbón autóctono tienen sus parques de almacenamiento de carbón llenos. De la misma manera, las minas de carbón comenzaron a dejar de extraer mineral por tener llenos sus parques de almacenamiento.
Como salida a este problema, el gobierno redacta el R.D.134/2010 amparándose en el artículo 25 de la Ley del sector eléctrico 54/1997 para conseguir el funcionamiento de aquellas unidades de producción de energía eléctrica que utilicen fuentes de combustión de energía primaria autóctonas, hasta un límite del 15% de la cantidad total de energía primaria necesaria para producir electricidad demandada por el mercado nacional.
Con el R.D.134 por el que se establece el procedimiento de resolución de restricciones por garantía de suministro, el Gobierno lo que hace es dar salida al carbón nacional de manera que las centrales térmicas que consuman carbón autóctono, tendrán preferencia en el mix energético nacional y se les demandará producción de energía eléctrica antes que las que consuman carbón importado. Debemos hacer mención además a que la demanda energética actual queda cubierta prácticamente con nucleares, hidráulicas y renovables.
Esto para Galicia es totalmente nefasto, pues tenemos dos centrales térmicas (una de Endesa en As Pontes, y otra de Gas Natural-Fenosa que es la de Meirama), estas dos C.T. realizaron en años pasados unas inversiones millonarias para poder quemar carbón importado en sus calderas. Ambas Centrales el año pasado y en lo que va de año (aún sin estar aplicándose el R.D.), ya vieron, por la falta de demanda, como se redujo la producción generada y por consiguiente las toneladas de carbón importado quemado.
Teniendo en cuenta que el procedimiento de resolución de restricciones por garantía de suministro que se regula en el artículo 1 de este R.D. será de aplicación hasta el 2014, las comarcas de As Pontes y Cerceda se verán afectadas en cuanto a la pérdida de actividad y reducción de puestos de trabajo en las dos comarcas debido a la falta de actividad en las dos centrales térmicas. Debemos pensar que la actividad con carbón importado se verá reducida prácticamente a cero (por lo menos hasta que no se comience a resurgir de la crisis) afectará a los puertos exteriores de Ferrol y Coruña (personal de descarga, de movimiento de carbón), transporte de carbón a las dos centrales. Trabajadores de compañías auxiliares, trabajadores de las empresas principales, hostelería, etc.
Esto se ve empeorado por la reforma laboral y la forma de despido barata y sencilla que pueden aplicar con la reforma los empresarios.
El carbón importado tiene un poder calorífico superior al carbón autóctono, produce menos escoria y ceniza, es más barato cada megavatio producido, produce menos gases de efecto invernadero, se puede decir que con la quema de importado se contamina mucho menos que con autóctono.
El gobierno español debe clarificar de una vez por todas cuál es el mix energético español, si queremos afrontar con garantías las pautas del Protocolo de Kyoto en lo concerniente a la producción de gases de efecto invernadero, con la quema de carbón nacional contaminamos más, lo que es una contradicción del gobierno. Por una parte, prima la energía renovable y por otra favorece la quema de carbón nacional.
Cuando el Consejo de la Comisión Europea se pronuncie sobre el R.D. y si este pronunciamiento es favorable a la aplicación de este decreto, paralelamente, nuestra Federación exigirá que se articulen una serie de mecanismos de compensación a las instalaciones que utilicen carbón importado, por las repercusiones sociales y económicas tan importantes que tiene para el conjunto de la economía gallega y en particular para aquellas zonas afectadas. También pediremos, como hasta ahora, compensaciones que frenen los efectos de la paralización de la actividad, garantizando unas cotas mínimas de operación de las térmicas afectadas. Queremos dejar claro que las compensaciones tienen que ser para los trabajadores y trabajadoras las dos comarcas afectadas (As Pontes y Cerceda).