El precio de los SSD para 2015 se estanca

Tras varios años de sufrir descensos importantes en los precios de las unidades SSD comercializadas, parece que a lo largo del próximo año, los precios se mantendrán sin alteraciones, propiciado por la escasez de unidades para equipar a portátiles, ultraligeros y dispositivos híbridos. Es lo que asegura una reciente previsión de mercado.
El almacenamiento normalmente supone el 8 ó 9 por ciento del coste de fabricación de un portátil, según este analista. Esto ha propiciado una progresiva bajada de precios de ambos durante varios años. Baja el precio del SSD y se reduce automáticamente el precio final de un portátil de última generación. Pero esto puede que se interrumpa el próximo año, en su opinión.


De este modo, aunque los precios de los discos SSD se mantengan el próximo año, el coste por gigabyte seguirá cayendo, ya que sigue al alza la capacidad de estos mismos dispositivos, asegura Fang Zhang, analista de IHS.
No obstante, los fabricantes de PC pueden recurrir a ajustar otras características de sus equipos para reducir este precio final, aunque los márgenes de beneficio de los ordenadores sean muy estrechos. Por ejemplo, podría reducirse su precio si se rebaja la capacidad de su memoria DRAM o las resoluciones de pantalla, incluso si se elimina la cámara web.
La estabilización de los precios del almacenamiento se calcula a partir de la densidad utilizada en los modelos ultrafinos, que seguirá en aumento. Sin embargo, el precio final de los Teras de memoria no volverá a caer hasta 2016, asegura el experto que sí pronostica un desplome posterior del precio hasta 2018.
Los fabricantes de memorias flash NAND están destinando más recursos a producir almacenamiento SSD para teléfonos inteligentes y tablets, otro motivo para que su precio se estabilice el próximo año. Proveedores como Samsung y Sandisk, destinarán más recursos a este tipo de discos para equipos ultrafinos, lo que reducirá su precio en 2016.
Mientras, el precio medio para portátiles de tamaño normal seguirá disminuyendo, según el análisis de IHS, que pronostica una transición cada vez más mayoritaria, desde los discos duros a los discos SSD, más rápidos y con menor consumo de energía.
Es una noticia de Agam Shah, IDG News Service

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